Hagamos un pacto de sangre...
Y que la noche sea testigo de tal inusual acto.
Bajo la luna radiante;
Sellemos la promesa de no dañarnos...
Y aunque sean incontables las lágrimas derramadas
Que ya con sangre se derramaron...
Te pido ya sin ánimos:
''¡Hagamos un pacto con sangre!''
Pues las esperanzas se van con los suspiros,
la resignancia ya me venció hace años...
¡Hagamos un pacto de sangre!
Y que las estrellas fugaces sellen el trato.
La nada me envuelve,
ante la realidad de tus actos.
Y como venda caída desnuda mi alma,
destapando mis ojos del hechizo realizado.
Hagamos un pacto con sangre...
Y si caigo en el olvido , caeré sin poder remediarlo...
Pero debes prometerme , aunque sobre una sonrisa tuya falsa sea,
que jamás volveremos a dañarnos...
Como mucho caeré en el olvido,
perdiéndome en el inmenso vacío de mi llanto.
¡Gélido y enloquecedor silencio infinito!
que provoca vivir sin ti, que a su vez provoca; no vivir....